Hace poco mas de un mes Apple «sorprendió» (lo pongo entre comillas porque ya se olía la jugada desde unos días antes) con el lanzamiento silencioso de la renovación de toda la gama de accesorios en lo referente a controlar la interfaz de usuario, lo que vienen siendo un nuevo teclado, un nuevo ratón , y un nuevo trackpad. En todos los casos encontramos elementos comunes como conector lightning y batería, de forma que podemos decir adiós a las pilas definitivamente, y todo eso sin olvidar el aumento de precios, desde «solo» 10€ en el caso del ratón, hasta la friolera de casi duplicar el precio del trackpad pasando de 79€ a 149€, algo que sin duda nos sorprendió a todos, y no de forma grata precisamente, ya que si bien es cierto que el nuevo Magic Trackpad 2 tiene tecnología Force touch al igual que ocurre en los últimos Macbook y Macbook pro retina (los Air los tienen un poco olvidados), creo que el aumento de precio está desproporcionado.
Del ratón hay poco que decir ya que es lo mismo que había hasta la fecha pero cambiando las pilas por la batería, del teclado supongo que se pueden decir muchas cosas pero como no lo he probado poco puedo opinar, ahora bien, el nuevo Magic trackpad si que lo tengo asi que es un buen momento para dar nota de las sensaciones que transmite.
Nuevo aspecto
Lo primero que sorprende al verlo es el nuevo aspecto del Magic Trackpad 2, y es que ahora hemos pasado del color aluminio a un color blanco que particularmente no me convence del todo, entre otras cosas porque la mesa que uso para el Mac es blanca y eso hace que no destaque demasiado. Supongo que lo de ponerlo blanco es para hacerlo a juego con el Magic Mouse, pero como digo no me convence.
Pero el color no es lo único que cambia, y es que ahora desaparece por completo toda la zona de las pilas quedando únicamente la zona táctil que ocupa el 100% del Magic trackpad 2. Dicha zona además es ahora más ancha, concretamente casi un 30% más ancha, algo que se nota y mucho, tanto para bien como para mal, lo que produce sensaciones encontradas.
Puesta en marcha
La puesta en marcha no puede ser más sencilla, y es que aunque podemos hacerlo como con el modelo anterior (enlazándolo por BT y esas cosas), la nueva gama de dispositivos cuenta con una función muy chula, y es que si lo conectamos por el cable lightning al Mac, además de cargar servirá para enlazarlo todo automáticamente, lo que es una auténtica gozada y aunque parezca una chorrada, hace que me quite el sombrero por lo bien que está pensado el tema.
Su uso diario
Lo primero que choca en su uso es el tema del tamaño, algo que como he dicho más arriba me produce sensaciones encontradas, y es que por un lado obviamente tenemos una mayor superficie táctil con todo lo que ello conlleva (el modelo anterior en ocasiones se puede quedar pequeño al mover objetos por la pantalla por ejemplo, algo que sigue ocurriendo con el nuevo, pero menos, lógicamente) pero también cuando quiero desplegar la barra de notificaciones desde el gesto de usar dos dedos de fuera a dentro del trackpad por la derecha, me encuentre que ahora donde antes estaba el borde ahora me encuentre que el trackpad aun esta ahi. Supongo que sera cuestion de acostumbrarse pero donde antes era un ligero movimiento de muñeca ahora es todo menos ligero.
Respecto al desplazamiento, tengo la ligera sensacion que al tacto es ligeramente mas suave la superficie que el modelo anterior, cosa que puede gustar más o menos, pero que en cualquier caso no es relevante en su funcionamiento, que por cierto es perfecto. Donde si se nota mas diferencia es el clic, y es que en el viejo modelo era más profundo que en el nuevo, algo que puede no gustar a todo el mundo, y que una vez más tocará acostumbrarse (en unos días ni me acordare de esto, estoy seguro).
Y llegamos al Force Touch, la mayor novedad seguramente, y es que ahora tenemos la posibilidad de trabajar con dos niveles de presión y un pequeño motor aptico que nos indica si estamos en el primer o segundo nivel, exactamente igual que ocurre con los Macbook y Macbook Pro retina desde hace un tiempo. El invento mola, pero nos encontramos de bruces con un problemón en el camino, lo primero porque al intentar arrastrar un archivo muchas veces nos equivocaremos y pulsaremos mas fuerte de lo debido, lo que es muy pero que muy molesto (sera cuestión de acostumbrarse), y sobre todo porque nadie, o prácticamente nadie le saca partido, con excepción de la propia Apple tal vez, y aun asi de forma muy pero que muy limitada, como por ejemplo:
- Safari: muestra vista preliminar de un enlace al pulsar fuerte sobre el, muy similar al peek en el iPhone 6S. Seguramente este sea el mejor uso que le doy por ahora.
- Messages: haciendo clic fuerte sobre un contacto nos muestra una ventana similar a si pulsamos en «detalles»
- Mapas: haciendo clic fuerte sobre un punto del mapa pondremos un marcador
- Calendario: haciendo clic fuerte sobre un evento mostrará el detalle del mismo, al igual que si hacemos doble click
Conclusiones
Muy buen dispositivo, con un tamaño genial para sacar mayor provecho (aunque haya que acostumbrarse) y con unos acabados increíbles a pesar de que el color blanco no me guste, y cuya principal funcionalidad es a dia de hoy totalmente infrautilizada, todo ello con un precio totalmente desproporcionado. Pensandolo friamente, si tienes un trackpad anterior no creo que merezca la pena el cambio, al menos pagando su precio oficial. Es cierto que nos olvidaremos de las pilas y tendremos un mayor tamaño pero no creo que eso justifique la inversión, y menos teniendo en cuenta las molestias ocasionadas hasta acostumbrarnos a las presiones adecuadas que hay que realizar en cada caso.
Ahora bien, si no tenias el modelo anterior la cosa cambia mucho, ya que el nuevo modelo supera en todo a su predecesor asi que si ya con el anterior el ratón pasaba a un segundo plano (y me costó mucho tiempo darme cuenta de ello y aceptarlo), con el nuevo la cosa es aún mejor. Eso si, ni aun asi creo que merezca la pena pagar 150€, aunque desde luego es mucho más justificable partiendo de cero que del modelo anterior.