El peligroso precio de la comodidad

La verdad es que este tema lo he comentado varias veces en los podcast, y he soltado algún que otro comentario esporádico al respecto en algunos post, sin embargo hasta ahora no me había animado a profundizar demasiado a nivel escrito. Prácticamente desde que me metí en el mundo mac tengo una extraña sensación, una sensación que no me gusta y que me hace sentir como si estuviera vendiendo un trocito de mi alma al diablo con cada compra o utilización de sus servicios, y razones no me faltan, Apple es sinónimo de algo sencillo, bonito, facil de usar, llamativo, pura tentación…. e incluso su logo es una manzana mordida ¿hay algo mas cercano al mítico jardín del Eden?

Bromas aparte analicemos un poco en profundidad, y es que se puede decir que Apple no da nada gratis, todo tiene su precio, y no me refiero al coste en €uros de sus productos (que poco o nada tiene que ver con este tema). Por ejemplo, nos compramos un iPod, sabemos que el precio es usar iTunes para sincronizar, que puede gustarnos o no, pero lleva asociado un funcionamiento que te impide sacar información de los dispositivos por tanto compras un iPod pero sacrificas el acceso a la información del mismo si algo falla en tu ordenador y necesitas recuperarla, así mismo olvidate de pode acceder a tu musica desde otros equipos mas haya de escucharla (es decir, no puedes manejar la biblioteca desde otro sitio) y por supuesto de poder sincronizar ese mismo iPod desde mas de un ordenador a la vez.

iPhoto

Otro ejemplo seria por ejemplo iPhoto, un software de gestión fotográfica que me encanta, pero que adolece de los mismos problemas que iTunes: todo muy bonito,pero solo desde un ordenador (un ordenador que si ademas es marca Apple funciona aun mejor claro). Podriamos pensar que el diseño inicial fue hace mucho tiempo y esas necesidades no existían, y dado lo complicado que es el software a la hora de programarlo pues no podrían mantener la retrocompatibilidad si hicieran cambios tan bruscos, pero sinceramente no cuela aunque venga aceptamos barco; ahora pasemos a algo mas moderno y a priori abierto por su concepción: Mobile Me, un servicio web de pago (y no precisamente barato) que sirve entre otras cosas para sincronizar de forma sencilla y efectiva la agenda y calendarios entre Mac, PCs y iPhones/iPad/iTouch, y como somos asi hemos comprado un iPhone asi que funciona a las mil maravillas, eso si, aunque al tecnología lo permite de sobra, no podremos cambiar de movil y seguir usando Mobile Me, lo que nos lleva mas profundo en el «infierno» Apple.

App Store

Y ya que tenemos un iPhone por supuesto habrá que compra Aplicaciones en su App Store, Aplicaciones que por supuesto solo funciona en iOS (lógico), y ese iOS solo se puede instalar en otros iPhone/iTouch/iPad, por tanto nos seguimos metiendo aun mas en ese simbolico infierno, vendiendo mas y mas trocitos de nuestra alma /libertad y siendo mas difícil volver atras, ya que ya no solo hablamos de las molestias de tener que pasar a otro sistema, de tener de migrar toda nuestra información/música/fotos etc… hablamos de una sustanciosa cantidad de dinero invertida en aplicaciones que si cambiamos de marca perderemos. Pero no contento con eso, nuestro pequeño diablo particular, ese que nos arranca mas y mas nuestra alma nos tiene mas sacrificios reservados, en esa App Store y con ese iPhone solo vas a poder hacer lo que Apple diga,  el te provee las funcionalidades que crea que debe darte y permitir que otros te den otras tantas que consideren mereces tener, pero si una cosa no le gusta a este diablillo no podrás tenerla. Pero claro a estas alturas, con todo ese ecosistema funcionando, todo ese dinero invertido ¿merece la pena cambiar por un pequeño sacrificio de no poder hacer TODO lo que me gustaría? para la gran mayoría no, pero el sacrificio esta ahí.

Mac app Store

Y así llegamos al ultimo trocito de nuestra alma que vendemos, la nueva Mac App Store, la misma filosofia de la App Store de iDispositivos adaptada al mundo Mac. Empezare por decir que por supuesto, a pesar de que no se adapte a la resolución de la pantalla me encanta el invento ( de hecho escribi hace muy poco un post sobre todo el potencial que podría llegar a tener el invento), funciona genial, es agil, bonito,sencillo… (de que me sonara todo esto?), y hoy por hoy hasta hay quien me podrá decir que su uso es opcional, lo que es cierto, a diferencia de su hermano, la Mac App es solo una forma mas de instalar software (la del iPhone es la única). Ahora bien, dejando de lado que esta Mac App Store es un chollo tanto para usuarios (facil,rapida…) y desarrolladores (han aumentado sus ventas considerablemente) también tiene su importante sacrificio: Solo esta en ella lo que Apple quiere, esto a dia de hoy no es un problema claro dado ese carácter opcional pero por otro lado.. ¿es realmente opcional? Si profundizamos un poco veremos que en realidad esa opcionalidad es mas un espejismo que una realidad, a fin de cuentas si es tan buena para todos lo logico es que la mayoría del software quiera estar ahi, aun a costa de recortar su funcionalidad (Evernote por ejemplo ha tenido que eliminar un par de opciones para poder estar, opciones en este caso superfluas y sin mucho uso, pero el caso es que las han tenido que quitar) y ¿quien pagamos esos recortes? los usuarios

Ahora avancemos un poco en el tiempo, concretamente 3 años, cuando mas o menos Apple presentara el sustituto de Lion (que no ha salido aun), y pensemos que para ese momento fácilmente y sin exagerar es muy posible que el 95% de las Aplicaciones para Mac estén en la Store, con esas cifras ¿que impide a Apple eliminar el resto de formas de instalación en pro de la seguridad? muchos dicen que eso es imposible, que en los Mac siempre se ha podido instalar lo que cada uno quiera, que eso seria el fin para Apple,etc… y no les falta razon (en parte), pero seamos coherentes ¿alguno de esos motivos impide realmente que Apple lo haga? no, la realidad es que si el 95% (y creo que me quedo corto) de las aplicaciones estan en la Store es o bien porque esas Apps han rebajado su funcionalidad (en caso de que su funcionalidad nativa estuviera fuera de los parametros de Apple) o bien porque Apple ha abierto la mano, en cualquier caso seria ya un camino sin retorno en el que dudo mucho que a Apple le temblara el pulso ni un poquito cerrando el grifo al resto. Y es que… ¿que suicidio es que no puedas instalar un 5% o menos de las Apps actuales? ninguno.

En ese momento es cuando cada uno de nosotros tendría que plantearse si es el momento de cambiar de plataforma o no, ya que si bien es cierto que en el iPhone estamos acostumbrados a ciertos sacrificios, no es menos cierto que los admitimos precisamente porque es un iPhone, por ejemplo no es el fin del mundo tener que ir online para ver el contenido de mi dropbox ya que es una cosa que miro de vez en cuando, en el Mac por contra es algo que uso 50 veces diarias por tanto no podría con ello. Tampoco es lo mismo ver una película reconvertida a formato iPad con Airvideo o Plex porque veo un capitulo al día, por contra en el Macmini veo mucho mas contenido y por tanto seria algo mucho mas incomodo,etc… El problema de fondo es que al no ser algo de la noche a la mañana nos iremos adaptando poco a poco, iremos sacrificándonos y vendiendo nuestra pequeña alma casi sin esfuerzo y una vez mas despertaremos un día y nos daremos cuenta que la marcha atrás es ya demasiado costosa a cambio de un pequeño sacrificio y a fin de cuentas todo es mas cómodo, el peligroso precio de la comodidad…

Conclusion: ninguna en realidad, que o bien los usuarios de Apple estamos bien jodidos, o somos los mas afortunados del mundo, según el punto de vista de cada uno en cada momento

4 comentarios en «El peligroso precio de la comodidad»

  1. Comparto plenamente tu punto de vista, y me jode mucho la manera que Apple hace y deshace a su antojo, soy un usuario culo inquieto de los que no se conforma con seguir al rebaño, y si bien Mac OS X es un SO genial, es lo que tu dices, hay que hacer las cosas así o no las haces. Apple piensa en ganar más y más, las funcionalidad, restricciones y demás cosas le importa poco, el iPad pudo tener cámara (no insensatos! Como va a ser eso) en la 2.0, y así lo mismo el iPhone, los Mac’s con Core2Duo y un largo etc.

    Si bien el camino fácil es el más cómodo, no siempre es el mejor. He descubierto que hay que tener libertad y flexibilidad. Desde que uso Ubuntu, que es menos bonito y no está todo «masticadito», he aprendido que puedo hacer lo mismo que con Windows y con Mac, con más trabajo, pero tengo autonomía y hago lo que me da la gana, sin gastar un solo céntimo, y teniendo un sistema operativo y seguro.

    En fin, hoy por hoy tengo iPhone, desde que termine la permanencia me iré a Android por motivos evidentes. Ni tener que hacer jailbrake para hacer algo tan simple, como usar Bluetooth o tener funcionalidades sin restricciones.

    Creo que si uno quiere puede abandonar una plataforma, el dinero invertido en soft, bueno eso fastidia, pero puedes verlo de este modo, piensa el ahorro que tendrás de ahora en más.

    Muy bueno tu post Iván, un saludo.

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  2. Totalmente de acuerdo contigo.No podemos sacarle todo el partido posible a nuestros dispositivos después de pagar mas ;tenemos q usarlos como y según ellos los han concebido sin desviarnos ni un ápice .
    Todo esto en aras de la gran experiencia de usuario q nos dan; nos enganchan con esto y con la compatibilidad y sintonía entre todos su productos .
    Paradójicamente esta «adicción» nos lleva a adquirir varios productos , q van renovando periódicamente para q podamos saciar nuestro particular síndrome de abstinencia, y lo preocupante es q salvo momentos puntuales de cabreo ante maniobras incomprensibles , seguimos comprando y contentos.
    Apple es nuestra droga tecnológica

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  3. Creo hay en el fondo otro elemento que discurre y es la fidelidad al espíritu de la manzana, una confianza en la visión de Jobs y el temor de convertirse en ovejas descarriadas si se abandona. O para los aspirantes al paraíso de privilegios de la casi «Secta Mac» la urgencia de pertenecer al grupo de los sobrevivientes al caos del inquietante mundo de la tecnología. Entre los dos extremos persisten miradas observadoras de síntomas de transparencia del modelo como nuevo paradigma. Por lo menos ya tuvo la bendición del presidente Obama.

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