La verdad, siempre que he tocado un Android de algún familiar para que se lo pusiera en marcha me ha pasado exactamente igual que cuando he puesto recientemente un ordenador con windows en funcionamiento: he acabado hasta el gorro y recordando porque hace años decidí pasarme a Mac. El caso es que en realidad la culpa no es solo de Google o Microsoft sino en general de los fabricantes, sobre todo en el caso de Pcs…que instalan mierdas por doquier.
El caso es que tenia ganas de vivir la experiencia Androide en primera persona y como sabia que no estaba dispuesto a dejar de lado mi iPhone, he buscado una posible solución en un teléfono para casa (si, de esos que ya solo se usan para llamar a los padres y que nos llamen ellos), concretamente el Panasonic KX-PRX150, un teléfono híbrido que ademas permite poner una tarjeta SIM, aunque particularmente no tengo intención de usar dicha funcionalidad. Su precio: unos 200€ (aunque yo lo he pillado de liquidación por menos de la mitad).
¿Por que este modelo? bueno, tampoco es que haya mucho donde elegir dentro de esta categoría, pero lo que me ha llevado a decidirme es que ademas de un teléfono domestico buscaba (como casi siempre) uno que fuera compatible con Skype (lo se… soy demasiado fiel a este software a pesar de que pasa el tiempo y sigue sin mejorar, pero de eso hablare en otro momento), y este lo era.
Panasonic KX-PRX150
El telefono en si es bastante grueso para los tiempos que corren, de hecho es como un iPod original. Es cierto que el modelo lleva ya 2 años en el mercado pero ya era grueso al ponerse a la venta.
El conjunto consta de 3 piezas, una base que va conectada a la toma de teléfono, una base de carga, y el propio teléfono. La verdad es que al principio me choco un poco esto ya que te obliga a usar 2 enchufes, pero luego te das cuenta que es un acierto ya que permite poner la base conectada a la toma de teléfono en cualquier sitio, y poner luego tu teléfono donde te apetezca tenerlo realmente, no estando condicionado a tener una toma RJ11 cerca.
El problema es que eso es lo único bien pensado de este Panasonic KX-PRX150, bueno miento, el sonido durante una llamada es de muy buena calidad, tanto entrante como saliente, de hecho es mejor que el del resto de los teléfonos que tengo por casa. Quitando eso el resto es muy mejorable, la pantalla se hace algo pequeña para hoy en día (3,5″) pero es mas que suficiente para el uso al que esta destinado, el problema es que su calidad y respuesta táctil es cuanto menos discutible.
Prácticamente lo único que buscaba era un teléfono que funcionara bien con Skype, y no eso he logrado: la webcam es desastrosamente mala, camara trasera similar, es como retroceder al iphone 3G.
Respecto a la capacidad de almacenamiento…apenas 2 Gb, de los cuales quedan libres para apps apenas 500 mb, lo que se traduce literalmente en 3 o 4 apps que no ocupen mucho, una vergüenza. Vale que se puede ampliar con microsd…pero aun así para salir de fabrica me parece poquísimo.
En cuanto a la batería, prácticamente sin usarlo, aguanta unas 24 horas a duras penas, no es ninguna maravilla para ser un teléfono «fijo» pero tampoco es grave.
He comentado que este modelo admite tarjeta SIM, yo particularmente no lo voy a usar, pero pero si no la pones te esta dando el coñazo con un símbolo de warning en las notificaciones todo el tiempo, algo muy molesto que no debería ocurrir.
Esta es la experiencia Android:
Se que muchos me dirán que me he comprado una mierda de teléfono y que no es comparable a un S5 o un G4, o un Nexus… y tiene razón, es mas, seguramente la mayoría de lectores de este blog se hubieran comprado uno de esos, pero dejando de lado que para usarlo como teléfono fijo tampoco hubiera merecido la pena invertir mucho mas, si en España el 80% de los teléfonos que se venden son Android es porque cuestan mas baratos que los iPhone. La mayoría de personas ni locos se gastan mas de 200€ en un móvil, y si puede ser menos mejor, compran autenticas basuras con software desactualizado y no les importa ya que «les funciona el whatsapp».
Conclusiones:
Sinceramente, si hubiera pagado los 200€ que marcaba el teléfono mi conclusión es de total decepción y lo habría devuelto, pero afortunadamente por 80€ puedo ser algo mas permisivo. Me lo tomo como que sirve para lo que sirve y poco mas. Por 200€ y estando centrado en un uso de teléfono de casa seguramente podrían haberse esforzado un poco mas y poner una mejor camara frontal y un poco mas de almacenamiento (me duele en el alma tener que poner una microSD para tener instaladas 4 aplicaciones) pero bueno…toca conformarse. Es un teléfono fijo, con que se oiga bien y Skype funcione me vale, aunque no debería ser así. Lo malo es que Skype tampoco es que vaya bien 🙁