Durante la tarde de hoy he tenido la suerte de que Techdata me ha invitado a un evento en el Santiago Bernabéu donde, entre otras cosas, ha habido una breve presentación por parte de Microsoft de la Surface Hub, un dispositivo que a simple vista podría parecer una tele muy grande, pero que en realidad es mucho más, ya que además de ser totalmente multitactil (soporta incluso varios usuarios a la vez interactuando), corre Windows 10 en su interior.
La verdad es que la Surface Hub me atrayo mucho desde que la vi en el evento de Microsoft de hace unos meses, y poder verla en directo y entender mucho mejor su concepto es algo que tenía bastantes ganas ya que si bien me gustaba la idea de un cacharro pensado para salas de reuniones, no acababa de verle el asunto a tener que pagar 20.000$ por una Hub. Bueno siendo sincero, ahora que entiendo el concepto sigue pareciéndome un cacharro excesivamente caro para lo que ofrece, pero al menos ahora sé que es mucho más que una tele grande con una especie de Airplay en su interior.
Lo primero que conviene aclarar es que la Surface Hub no es un ordenador para ser usado como tal, si no que esta planteado como un dispositivo para reuniones de trabajo, tanto presenciales como remotas, y que una vez que ha terminado la reunión borra todo para quedarse lista para la siguiente reunión. En los laterales de este dispositivo (disponible en 55 y 85″) tenemos 2 stylus pegados muy parecidos a los que podemos encontrar en la Surface Pro 4, si bien en este caso cuentan con interesantes ventajas como que tienen una batería recargable de forma inductiva mientras están pegados magnéticamente a la Surface Hub. Una vez separado alguno de los lapiceros / stylus, la Hub entiende que es hora de ponerse a trabajar y se desbloquea y queda lista para iniciar una llamada por Skype con aquellos que no puedan estar presencialmente en la reunión, asi como permite escribir en la pantalla en un pseudo OneNote gigante para mostrar lo que se desee tanto a las personas que estén en la misma sala, como las personas remotas.
Hasta aquí todo «normal», y no muy diferente a poner una cámara HD de videoconferencia en un lado y poner una pizarra táctil en el otro donde escribir (aunque evidentemente más sofisticado). Pero la cosa no acaba aquí para la Surface Hub, ya que además permite a cualquier persona de la reunión (tanto si está presencialmente como si no ) compartir su pantalla su pantalla con el resto (lo sé, estaréis pensando: le conecto un Apple TV o similar a la pizarra digital y a correr), y lo más importante, y aquí es donde la matan: permite tomar el control de dicha pantalla de forma remota desde el propio Surface Hub, lo que os puedo decir que mola, y mola mucho.
Para entenderlo mejor nada como un ejemplo práctico, suponiendo que haya entendido la idea bien, la cosa seria tal que: Sala de reuniones A, situada por ejemplo en Madrid, donde estan fisicamente A1, A2 y A3 frente a un Surface Hub, por otro lado tenemos la sala de reuniones B, que casualidades de la vida está en Australia y en ella tenemos a B1 y B2 junto a otro flamante Surface Hub, y luego está un tal C1 más feliz que un regaliz en en su casa. Pues bien, si lo he entendido bien A1 coge el lápiz y automáticamente se desbloquea el invento y llama a la Sala B y al majo de C, que anda en calzoncillos pero que que ha puesto una camisa para disimular (admitamoslo, una de las cosas que más mola del teletrabajo es poder estar en calzoncillos mientras se curra). Pues bien tras las oportunas presentaciones y contar que tal el fin de semana, A1 cede la palabra a B2 para que cuente lo que tenga que contar, quien tranquilamente dice a su Surface Pro 4 «ahora vas y apareces en la pantalla grande», se levanta y se pone a explicar a todos lo que se tercie, manejando su Pro 4 desde el pantallote que es el Hub; claro que A3 no está muy convencido y se levanta y se pone a poner anotaciones en la pantalla (que recordemos que es en realidad la pantalla de B2 que esta a tomar por culi de distancia). A todo esto los asistentes ven que C1 se levanta a coger algo de la nevera, desvelándose el gran secreto: en realidad no esta delante del ordenador, si no de un móvil (por suerte aún nadie se ha dado cuenta de los calconzcillos), cuya pantalla puede compartir con todos también por supuesto.
Lo cierto es que el ejemplo práctico que han contado en la presentación es algo más simple, y eso hace que dude si realmente se puede hacer todo lo que he puesto en el ejemplo chorra de arriba, la lógica me dice que si, pero tal vez haya alguna limitación aun y quiza no se permita interactuar con pantallas que no sean la que tenemos delante, pero lo que es indiscutible es que todos los que estén físicamente en la habitación pueden mandar su imagen al Hub e interactuar desde el mismo, lo que ya de por sí es un gran avance.
En cualquier caso hay varias cosas que tengo claras:
- A) quiero uno
- B) no tengo los 20000$ que cuesta
- C) no quiero esperar a Enero de 2016 a tenerlo (es cuando sale)
- D) no tengo sala de reuniones
- E) no hago reuniones
- F) sigo queriendo uno, ¿quien me lo regala?
Bromas aparte, como he dicho antes, el cacharro mola mucho, aunque no creo que este justificado pagar 20000$ por ello, me parece excesivamente caro. Tambien comentar que aunque unicamente es compatible con dispositivos con Windows 10 lo cierto es que si tenemos un Android tambien podemos mandar nuestra imagen a la pantalla del Surface Hub, aunque tan solo podremos verla y no interactuar con ella.